Descripción
A finales de septiembre empieza a llegar el frío, y aunque todavía quedan unas quincenas de idas y venidas de calor, muchos nos planteamos guardar las alfombras finas de verano y sacar abrigos para el suelo de nuestra vivienda. Queremos salir de la cama y posar los pies descalzos en una alfombra mullida y de pelo largo que nos aísle del frío.
Buscamos cubrir el suelo de modo que no haya ni una baldosa o tabla helada sobre la que poder pisar por error. Y para eso necesitamos alfombras de pelo. Pero, ¿sabes cómo limpiar las alfombras de pelo largo? ¡Nos preparamos para el invierno!
Particularidades de las alfombras de pelo largo
Las alfombras de pelo son ideales para invierno. Por un lado, ayudan en parte a calentar la vivienda y a conservar el calor dentro, del mismo modo que un abrigo mantiene el calor del cuerpo. Por otro, su comodidad hace que nuestros pies puedan seguir estando descalzos, como en verano, algo que agradecemos, especialmente cuando nos despertamos.
Sin embargo, las alfombras de pelo tienen por contra ser imanes para la suciedad. La forma de su tejido hace que el polvo en suspensión se pose más sobre ellas que sobre ninguna otra superficie, o que la suciedad que llevamos en los zapatos quede fijada con más facilidad.